Con este tiempazo, lejos de pesar en ir afinando el body, nos apetece quedarnos en casa y darnos un homenaje con las cosas que siempre tenemos en la nevera (esto fue lo que me paso a mi esta semana). Pero es que en mi casa siempre hemos sido muy de "recetas según la época", orejas en carnaval, huesitos de san expédito y torrijas en Semana Santa.....Vivan las tradiciones!
Quiero aprovechar esta humilde receta (que ni siquiera se la puede llamar así, de lo fácil que es), para reivindicar nuestros dulces de toda la vida. Seguramente con esto lo que quiero es defender mi teoría de que este tipo de platos no son cutres, sino un postre tradicional (típico de nuestras celebraciones de cuaresma), sano (pan, leche y huevo) y exquisito (probadlo).
A mi también me gustan los cupcakes, sobre todo como elemento decorativo (je,je). Pero es que, aunque sea mujer, quiero que lo que me llevo a la boca, además de mono esté rico. Y yo como con los ojos, pero tambien con el estómago. Y mejor no hablamos de los colorantes y demás químicos que llevan esas cositas tan monas de color "mint" y "pink".... llamadas macarons.
Asi que por favor, más platos de la tierra y menos franchutes.
Y si quereis darle un poco de glamour al plato: bola de vainilla y hojita de menta......monísimo!!!
Creo que esta vez no tengo que decir nada de la elaboración.
En este caso, he utilizado pan especial de hacer torrijas de Mercadona. Es que en mi casa somos tan "apanarrados" que es imposible que llegue a tener pan de 2/3 días. Pero con pan normal, están más ricas.
Y yo no le hecho ningún tipo de jarabe, miel, sirope.... Solo azucar y canela.
totalmente de acuerdo contigo. tomo nota para probarlas porque las demas recetas estaban buenisimas.el solomillo al cava fue un exitazo en navidad y los canelones facilisimos y exquisitos
ResponderEliminarGracias Julia, eres un solete. Un beso
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