Como un paseo por las nubes fue la visita a la maravillosa Venecia, con la excusa de trabajar, tuve el placer de perderme por sus canales y callecitas y descubrir a los amables gondoleros, contadores de historias y brillantes compañeros de viaje. Perderse en sus minúsculas calles, descubrir que el puente mas famoso no le hace sombra a los pequeños desconocidos que te encuentras por el camino, descubrir el cielo a la vuelta de cada esquina, este regalo para los sentidos solo puede pasar en la maravillosa Venecia.
No te puedes perder:
1. Piazza de San Marcos, es lo típico, pero esta si no te defrauda, y por supuesto visitar su basílica, un placer para los sentidos.
2. Basílica de Santa María de Frari, con su impresionante retablo de Tiziano.
3. Navegar por los canales y salir al encuentro del gran canal.
4. Visitar el Palazzo Ducale, y sentirte como Sisi Emperatriz, o mas bien Romy Snechider.
5. No te puedes ir sin visitar el puente de Rialto, ganaba en mi imaginación.
6. Tomar una copa en el Harrys, aunque el precio de la Coca Cola sea de 20€.
7. Coger una góndola y pedirle al gondolero que te explique su día a día en la isla, el de él y de los 60.000 venecianos que viven entre los canales.
8. Comer, comer y comer, pasta, pizza, gelatto, y cualquier palmerita de hojaldre de cualquier pastelería, todas están increíbles.
9. Teatro La Fenice, adelántate y consigue tus entradas, una velada italiana perfecta con una ópera de Rossini.
10. Piérdete, olvídate del mapa, métete en el papel de un mercader en la antigua Venecia, déjate llevar por la tierra de Vivaldi, vaga por el archipiélago mágico, y la tierra del carnaval barroco, déjate seducir y llénate de Venecia.
Un consejo, intentad visitarla en invierno, el frío es duro, pero te dejará disfrutar mas, que la oleada turística del verano.
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